JUAN MARÍA SEGURA

Hacia ambientes innovadores de aprendizaje

Por Juan María Segura


La reciente publicación por parte de la OECD del manual de ambientes innovadores de aprendizaje (The OECD Handbook for Innovative Learning Environments) calza como anillo al dedo en el debate que apenas se insinúa en algunas jurisdicciones educativas argentinas. Si bien la reforma de la escuela secundaria de CABA es el caso que más resuena en los medios, sin dudas no es el único, dado que el Consejo Federal de Educación está realizando un trabajo a conciencia puertas adentro, con el fin de impulsar cambios que permitan al sistema actual y a sus egresados dialogar con más naturalidad con una época de la historia tan novedosa como desafiante. Solo piense que, durante el año pasado, unas 500 horas de videos se subieron a Youtube cada minuto, mientras se vendieron 48 teléfonos inteligentes… por segundo.

La preocupación de la institución en el tema no es una novedad. Desde hace al menos 12 años la OCDE trabaja en el esclarecimiento de marcos, metodologías, casos y principios que puedan servir de guía para que los países impulsen reformas educativas sobre nuevas bases y acuerdos. Y lo hace luego de verificar que el aumento promedio del 20% de inversión por alumno por parte de los países miembros durante la última década no ha reportado beneficios significativos en términos de calidad de aprendizajes.

El informe analiza casos inspiradores de ambientes innovadores de aprendizaje, provenientes de Bélgica, Sudáfrica, Nueva Zelanda, Canadá y Perú (¡un aplauso para Innova Schools!). Mas allá de las particularidades de estos, y pensando en nuestro país, creo que lo más valioso del informe es comprenderlo como una pieza dentro de un proceso y una conversación iniciada hace más de 10 años por expertos, docentes y diseñadores de políticas públicas. Proponer una reforma de verdad, profunda y disruptiva demanda iniciar un diálogo abierto, honesto, interesado en las miradas y opiniones de los otros. Esta estrategia no solo favorece la generación de acuerdos, sino que también enriquece el debate y permite ir gradualmente fijando logros en el diseño, que luego redundarán en implementaciones con más apoyos que resistencias.

El diálogo de OECD sobre este tema se inició en 2005, logró su primer acuerdo conceptual en un documento publicado en 2010 bajo el título “La naturaleza del aprendizaje: utilizando investigación para inspirar la práctica”; luego se reforzó con dos documentos publicados en 2013, “Los ambientes innovadores de aprendizaje” y “Liderazgo para los aprendizajes del siglo 21”; y más tarde, en 2015, se publicó “Rediseño escolar: hacia sistemas innovadores de aprendizaje”. Ahora llega este manual, y seguramente en el futuro inmediato tendremos otras orientaciones igual de valiosas.

No es mi intención abrumarlo con este listado de documentos que seguramente querrá leer, sino iluminar el trayecto que creo debe recorrer una reforma para poder implementarse a escala con éxito. Una reforma nace herida y con bajas pulsaciones si no se gesta a partir de un diálogo o alianza de actores. El informe llama la atención sobre este tema, indicando que tanto docentes, como escuelas y administradores locales del sistema, no solo debe implicarse de una forma especial en la etapa de implementación, sino que además deben gravitar al momento de la discusión del nuevo diseño. Es cierto que esta estrategia es más tediosa, consume más tiempo, demanda más escucha, obliga a matizar miradas, fuerza a la concreción de acuerdos, pero es un camino que, adecuadamente liderado, genera un direccionamiento claro, una marcha firme, un marco de trabajo a partir del cual resulta más sencillo avanzar, fijando metas intermedias.

En el mes de la educación, además de recordar a Sarmiento, Estrada y a todos quienes fueron nuestros grandes próceres educativos, alentemos la creación de una alianza de actores, tanto de adentro como de afuera del sistema, que nos permita poner nuestra mirada en ese futuro que nos provoca y desafía. Recuerde que, en septiembre, además de celebrarse el día del maestro, del profesor universitario, del preceptor, del estudiante, del bibliotecario y el día internacional de la alfabetización, también se celebra el día nacional del inventor, y se cumplen 19 años desde que Google puso operativo su motor de búsqueda. Esas pistas también deben ser parte del debate, pues marchamos sin pausa hacia la cuarta revolución industrial, con todo lo que ello supone de novedoso e incierto.