JUAN MARÍA SEGURA

Renacer

Por Juan María Segura


Invadido por la alegría del resultado de las elecciones en la Argentina y, en especial pensando en los más jóvenes y en los que más sufren la pobreza, la falta de educación y trabajo, y el flagelo de la droga, comparto algunas sensaciones breves que me salen de las entrañas.

Estamos viviendo el final de una etapa política muy penosa para nuestro país, construida sobre la base del robo a escala, la mentira despiadada, la connivencia inescrupulosa y las amenazas sistemáticas. ¡El delirio Kirchnerista llegó a su fin el domingo a la noche cuando se hicieron públicos los primeros (55% del total...) votos escrutados! Y también quedó herida de muerte una forma de hacer política en nuestro bendito país que solo benefició a muy pocos y perjudicó a la mayoría. Finalmente el Estado volverá a ser un instrumento al servicio de la sociedad, y no una suciedad puesta al servicio de una patota. ¡Afortunadamente!

Con Horacio Rodríguez Larreta en la Ciudad de Buenos Aires, María Eugenia Vidal en el Provincia de Buenos Aires, Morales en Jujuy y seguramente Mauricio Macri a nivel nacional nació una nueva Nación. De verdad siento que es el renacer del país, no solo por el resultado de las urnas, sino por la contundente demostración de inteligencia de los votantes, aun haciéndolo desde el dolor y la desesperación producida por problemas crónicos que llevan décadas sin solución. Se intentó atropellar a la gente que más sufre a partir de las dádivas y las amenazas, y la respuesta fue contundente, inteligente, patriótica, emocionante, sin atenuantes. Una mención especial para la Provincia de Buenos Aires, territorio que queda atravesado por la droga y el sufrimiento de millones, luego de 8 años de gobierno en donde Scioli solo intentó no llegar con cicatrices a lo que creía sería su gran noche consagratoria. Los bonaerenses fueron los grandes jueces de este ejercicio democrático, y los sepultureros del Kirchnerismo.

Emocionante el trabajo realizado por los fiscales y la sociedad civil, garantizando la transparencia del proceso electoral. A más de 30 años de estar viviendo en democracia, recién ahora vemos con claridad y asumimos que la salud del sistema político representativo depende, en gran medida, del trabajo de la sociedad civil y del grado de involucramiento de los ciudadanos en los "asuntos de la política". Más vale tarde que nunca. ¡Maravilloso aprendizaje!

Finalmente, una mención especial para Sergio Massa. ¡Enorme el trabajo que hizo, tanto él como todos sus compañeros de equipo y de campaña! Un importante periodista dijo el mismo domingo a la noche que los dos grandes ganadores de las elecciones habían sido Vidal y Massa. Coincido. Este último logró disputarle electorado peronista clave al candidato de la Presidenta y, además, elevó el nivel de todo el proceso electoral, forzando a los otros candidatos a que muestren y expliciten propuestas concretas, ministros articulados con las campañas y acciones de gobierno en caso de ser electos. Esta forma responsable de proceder ha fijado de ahora en más un nuevo piso de exigencia para quienes aspiren a tan alta responsabilidad.

El 25 vivimos una noche mágica, que deberemos convertir en realidad. Emerge una nueva oportunidad para el país, que espero entre todas transformemos en mejor calidad de vida y más trabajo para la gente.

Las Naciones no se merecen, se construyen cada día. Dejemos de delegar en terceros lo que nos toca a cada uno. ¡Comencemos!